Principales movimientos independentistas en Hispanoamèrica

PRINCIPALES MOVIMIENTOS INDEPENDENTISTAS EN HISPANOAMÈRICA


       Los  principales focos de la  revolución hispanoamericana se formaron en México, en Caracas y en Buenos Aires. En cambio, la defensa de la Corona Española se mantuvo en el virreinato del Perú.


LA REVOLUCÒN EN MÈXICO


       La mayor parte de la población de México estaba formada por campesinos indios y mestizos que vivían en una situación de desamparo y miseria. La población blanca formada por criollos y españoles, estaba dividida en un grupo partidario del mantenimiento de las instituciones virreinales y en otro grupo partidario de crear un gobierno provisorio, similar al de las Juntas formadas en España.
        La acción revolucionaria contra las autoridades virreinales mexicanas fue iniciada en la ciudad de Dolores por el cura Miguel Hidalgo, el 16 de setiembre de 1810. El movimiento tuvo gran respaldo popular porque agrego el propósito de devolver tierras a los pueblos indígenas y abolir la esclavitud. Sin embargo, la desorganizaciòn de las fuerzas armadas reunidas por Hidalgo facilitó la derrota militar.
       La lucha fue continuada por otro sacerdote, Josè M. Morelos, quien reunió un congreso en la ciudad de Chilpancingo donde se proclamó la independencia el 6 de noviembre de 1813.
       La lucha por la emancipación continuó hasta el año 1821 en que fue posible organizar un gobierno nacional que inició la vida independiente.


      LA  REVOLUCIÒN EN  VENEZUELA  Y  EN NUEVA GRANADA


       Tanto en la Capitanía General de Venezuela como en el Virreinato de Nueva Granada se crearon Juntas de gobierno en el año 1810, pero por distintos motivos, tanto en Caracas como en Bogotà, estas primeras Juntas no lograron afirmarse en el poder.
       En el año 1813, el caraqueño Simón Bolìvar efectuó un nuevo movimiento revolucionario que estableció por un corto tiempo la República de Venezuela. Después de una etapa de luchas inciertas, en abril de 1815  llegó a Venezuela una poderosa expedición española, dirigida por el general Pablo Morillo, que restableció la autoridad de España en todo el territorio.
        Simón Bolìvar, en 1816, comenzó un nuevo movimiento revolucionario que, finalmente, tuvo éxito. En 1819, derrotó las fuerzas españolas en Nueva Granada y ocupó Bogotà. A continuación, el Congreso de Angostura declaró constituida la República de Colombia y proclamó la unión con la Capitanía de Venezuela.
        Para asegurar el triunfo de la independencia de Colombia y Venezuela, Bolívar decidió, en 1822, realizar una campaña sobre Quito (Ecuador) y sobre el virreinato del Perú, donde existía un poderoso centro militar español. Las campañas militares de Bolívar, desde el norte, y del general argentino Josè de San Martìn desde el Río de la Plata, se dirigieron a someter ese último baluarte español.

La Revolución Oriental

                                                  LA  REVOLUCIÓN  ORIENTAL

    Entre 1806 y 1807, barcos ingleses atacaron en dos oportunidades las colonias españolas del Río de la Plata. Primero conquistaron la ciudad de Buenos Aires, donde residía el Virrey, haciéndolo huir.

    Fue entonces que los vecinos de Montevideo organizaron una expedición para la conquista y, con el apoyo de los porteños, obligaron a rendirse a los ingleses.

    Más tarde la flota inglesa atacó Montevideo, penetraron en la ciudad y establecieron un dominio que duró siete meses. Durante ese breve período comerciaron abriendo mercados para los productos de la industria de su país, fundaron el primer periódico y difundieron sus ideas políticas y religiosas.

     Al querer recapturar Buenos Aires fracasaron y tuvieron que retirar definitivamente sus naves del Río de la Plata.

     En esos meses los criollos hicieron una doble experiencia:

       Comprobaron las ventajas del libre comercio frente al régimen español de monopolio,

       Observaron la debilidad de las fuerzas españolas y su propia capacidad para organizarse.

Poco tiempo después, en Europa sucedieron hechos que tuvieron una gran repercusión en todas las colonias españolas: en 1808 ejércitos franceses, que respondían a su emperador Napoleón, invadieron España y tomaron prisionero al rey Fernando VII.

En muchos pueblos y ciudades de España y de América se formaron Juntas de Gobierno, sosteniendo que al no estar el rey, el poder debía volver al pueblo.

En Montevideo, en 1808, la población se reunió en cabildo abierto y se formó una Junta presidida por el gobernador Elío, reafirmando su lealtad a España.

En mayo de 1810 en Buenos Aires se instaló una Junta, la que resolvió, por el contrario, cesar al virrey español y reemplazarlo. Así comenzó la sublevación contra España en el Río de la Plata.

Las autoridades españolas residentes en Montevideo no reconocieron a la Junta de Buenos Aires, pero los pueblos, villas y la campaña oriental se fueron plegando a las posiciones de la Junta de Mayo.

Por eso la revolución en la Banda Oriental tuvo características propias:

       Surgió en el medio rural. Más que minorías ilustradas de la ciudad, fueron hombres de campo quienes la encabezaron. La ciudad de Montevideo, por el contrario, se volvió el centro de la contrarrevolución.

       Fue caudillista, es decir dirigida por quienes no ostentaban títulos emanados de una autoridad, sino que eran proclamados espontáneamente conductores de la lucha por multitudes gauchas e indígenas. Cada región seguía a su caudillo, pero hubo uno con el que todos se sintieron identificados: Artigas.

       Se inició de manera espontánea y en diferentes lugares a la vez; los pobladores del campo se iban uniendo, sin orden ni disciplina, en un ideal común, que poco a poco se iba definiendo.

       Fue un movimiento policlasista, pues no solamente eran los gauchos y los peones los que se rebelaban, sino que también estaban presentes hacendados, capataces, curas párrocos, así como indios y negros libertos.

                                                                                                Historia 5º año - AULA

La Independencia delas Colonias Americanas

LA  INDEPENDENCIA  DE  LAS  COLONIAS   AMERICANAS

     Mientras algunos países europeos (Inglaterra, Bélgica, Francia) se industrializaban, España no lo hacía.

     Dado el escaso desarrollo de sus industrias, el oro que había recibido de las colonias americanas se empleaba para pagar las mercaderías que compraba a otros países y los préstamos que recibía para armar sus ejércitos. Durante los siglos XVII y XVIII, España se estancó y se empobreció.

      Las transformaciones que, hacia el año 1800, vivían Inglaterra y Francia eran muy profundas y allí se ubicaba el centro del poder en esa época.

      El cambio tecnológico tuvo como avanzada a Inglaterra, donde el empleo de la maquinaria a vapor en la industria textil permitió producir telas en cantidades jamás pensadas y rápidamente esa tecnología se extendió a otras ramas de la industria y la navegación.

       El cambio político, que aseguraba la igualdad de derechos tal como lo proponía la burguesía, es decir los poseedores de capital, se expresó sobre todo en Francia donde la monarquía fue sustituida por una república.

       Mientras tanto, en América, la creciente población criolla aumentaba sus exigencias de participación política y de apertura comercial, frente a la rigidez del régimen monopólico español.

       Aunque  desde 1740 la monarquía española había tenido que disminuir en algo ese régimen monopólico, esos tímidos cambios no conformaron a los criollos.

     La decadencia española se acentuó cuando el ejército francés invadió España en 1808. En ese momento en los pueblos españoles se formaron Juntas para organizarse contra los franceses y en América se difundió la consigna:”¡Juntas, como en España!”

      Instaladas las Juntas (en Buenos Aires, Santiago de Chile, Caracas, etc) su objetivo inicial fue cambiado, porque tomó fuerza el reclamo de los sectores criollos que siempre habían visto desatendidos sus intereses en la producción y el comercio. Si en un principio el enemigo de las Juntas era Francia, los americanos comenzaron a darse cuenta de que solo iba a ser posible el desarrollo de estas tierras liberándose del imperio español.

      A partir de 1810, la lucha en el continente va a tener grandes centros, Venezuela y el Río de la Plata, con el objetivo de obtener la independencia de España.

      Los patriotas del norte, dirigidos por Simón Bolívar proclamaron la libertad de Colombia, Venezuela, Ecuador y Bolivia.

      Por su parte el ejército criollo de San Martín actuó en el Río de la Plata, en Chile y en Perú.

      En nuestro suelo la revolución estuvo muy unida a los acontecimientos que sucedieron en Buenos Aires. En contacto con la Junta porteña, Artigas encabezó la insurrección oriental, en 1811.

                                                                                                 Historia 5º- AULA

Video del Origen del Universo

Mapa económico de la Liga Federal

La integración política de la Liga Federal debía ir acompañada de la integración económica de una amplia y compleja región. Para ello, era necesario hacer realidad el artículo 14 de las Instrucciones del Año XIII, que establecía "...que ninguna tasa o derecho se imponga sobre artículos exportados de una provincia a otra, ni que ninguna preferencia se dé por cualquier regulación de comercio, o renta a los puertos de una provincia sobre otra, ni los barcos destinados de esta provincia a otra serán obligados a entrar, o pagar derecho en otra".

                                                                                                  "La enciclopedia del estudiante"
                                                                                                    Santillana, Montevideo, 2007
                                                                                                                 (Adaptación)

¿Cómo se desencadenó la Revolución?

¿CÓMO SE  DESENCANDENÓ  LA  REVOLUCIÓN?

        En 1789 las medidas económicas adoptadas por Luis XVI, joven rey de Francia, frente a la crisis económica que padecía el reino (la escasez de alimentos, el estado de opresión del pueblo), así como la difusión de las Nuevas Ideas fortalecidas a lo largo del siglo, habían convertido al reino en un polvorín a punto de estallar.

        El 14 de julio de 1789 el pueblo se dirigió violentamente a la Bastilla, prisión donde estaban detenidos los opositores al sistema de gobierno y punto estratégico del plan de represión de Luis XVI (sus cañones apuntaban a los barrios obreros), y la tomó por la fuerza.

     Cayó así el símbolo de poder del rey, dándole al pueblo confianza en su propia fuerza.

     Después de este acontecimiento el gobierno perdió el control de las provincias, el pueblo atento contra las autoridades del antiguo régimen, los campesinos enfrentaron a los señores feudales y sus castillos fueron saqueados e incendiados.

       Para apaciguar la revuelta campesina se resolvió hacer concesiones; la noche del 4 de agosto de 1789 el clero y la nobleza renunciaron a sus privilegios. Se fueron consagrando los principios de la revolución, desplazando del poder a los nobl4es y partidarios del absolutismo. Fue así que la Asamblea Nacional Constituyente comenzó la redacción de una Constitución, que estableció un régimen de monarquía constitucional con tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial), y si bien el Ejecutivo que daba a cargo del rey, su poder estaría limitado.

       En el preámbulo de la Constitución, denominado Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, los delegados formularon los ideales de la revolución, sintetizados más tarde en tres principios: “libertad, igualdad y fraternidad”.

       El movimiento revolucionario continuo, miles de personas murieron, entre ellos el rey y la reina, que fueron decapitados mediante la guillotina. A la muerte del rey se instaló en Francia la República, que pudo mantenerse apenas unos pocos años.